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El Gobierno inauguró un nuevo Centro de Desarrollo Infantil en la ciudad

Este viernes, la agenda del gobernador Claudio Poggi arrancó con una gran expectativa que se mezcló con emoción e ilusión por el futuro de todos los sanluiseños. Pasada las 9, bajo la presencia y la atenta mirada de la ministro de Desarrollo Humano, Mónica Becerra, y el ministro de Educación, Guillermo Araujo, quedó inaugurado el primer Centro de Desarrollo Infantil ‘Arcoiris II’ del barrio Amppya.

Los alumnos de sexto año de la escuela Nº12 ‘Ramón Carrillo’ llevaron en alto las banderas de ceremonia, junto con vecinos y trabajadores de infraestructura que acondicionaron el edificio.

Desde el lunes, 40 niños y niñas entre 45 días de edad hasta los 3 años, asistirán al edificio que cuenta con dos salas; una cocina; dos baños; un patio interno y uno externo con un área de juegos.

Durante la ceremonia, la ministro destacó que este CDI será una gran herramienta para fortalecer la contención y la educación de las familias de la zona. “Es un día de fiesta, hoy podemos reabrir los jardines maternales que se habían cerrado y como dije en otras inauguraciones, estos lugares van a ser para acompañar el crecimiento social, emocional, físico y cognitivo de un niño, pero también se va a trabajar con la familia, codo a codo”, aseguró Becerra.

Además, consideró que la iniciativa que lleva adelante el Gobierno de San Luis de inaugurar Centros de Desarrollo Infantil en cada rincón de la provincia, es una manera de fortalecer la educación de los sanluiseños.

Por otro lado, coordinadoras y representantes de otros CDI que funcionan en la ciudad, más algunos jardines maternales, se encargaron de ponerle color a la apertura del establecimiento con regalos como una bandera de ceremonia y juguetes para los niños que asistirán de lunes a viernes.

“El personal que hoy atiende este Centro de Desarrollo tiene muchísima sensibilidad maternal; ese es el requisito principal para cuidar a un bebé o un niño”.

Así se expresó el gobernador Poggi cuando brindó unas palabras durante el encuentro para destacar la importancia de invertir en la primera infancia y la educación de los niños. También resaltó que la estimulación temprana favorece el futuro educativo y la capacidad de aprendizaje.

“Es una gran alegría, porque en el contexto social que estamos viviendo era uno de los pilares de nuestra propuesta de gobierno, una fuerte inversión en reconstruir el tejido social, el tejido familiar y no destruirlo. La primera infancia cumplió un rol clave, y por ello dispusimos dos medidas de inmediato; uno era diseñar, pensar, fortalecer, reabrir, como en este caso, los viejos jardines maternales. Estamos creando y abriendo puertas de Centros de Desarrollo Infantil en toda la provincia, para que los padres, de niños desde los 45 días, puedan tranquilos dejarlos en manos de un equipo profesional y de muchísima sensibilidad humana”, explicó Poggi.

Según los datos que brindó Poggi, en San Luis apenas tres de cada 10 niños van a sala de 3 años del Nivel Inicial. De ahora en más, el objetivo principal que tendrá el Gobierno es habilitar 160 salas en toda la provincia en los próximos cuatro años para llegar al 100% de esa población etaria.

“Nuestro primer objetivo es llegar inaugurar 40 durante este año, es decir la cuarta parte, 40 el año que viene y así hasta llegar a lo que nos hace falta. Con estas salas maternales vamos a lograr que el puntanito o la puntanita, cuidando además a la mamá en su embarazo, crezcan bien, felices. El sentido de abrir muchos Centros es para que los papás puedan seguir trabajando o estudiando”, aseguro el jefe de Estado.

“Siempre habrá una sonrisa y sorpresas para compartir”

Daiana Gimenez, mamá de una nena de 2 años que asistirá a ‘Arcoiris II’ concluyó la emotiva inauguración con un poema: “Construyamos juntos nuestro jardín, solo necesitamos alegría; tierra firme donde pisar, aunque no tenga cerca la mano de mamá; un techo bien grande abierto donde asome el sol que llevamos adentro; paredes de cuentos, palabras de ilusión donde queden pintado un cuadro y una flor; espacios infinitos donde jugar con arena, bloques y cajas de verdad; canteros de letras que puedan formar mi nombre, tu nombre y mil cocas más; un lugar muy especial donde el cuento se transforme en una historia real. El jardín ya está listo para todos los que quieran venir, siempre habrá una sonrisa y sorpresas para compartir”.