Explotó la inflación tras la masiva devaluación de Massa: Los precios de CABA se dispararon un 10,8% y la inflación de agosto superó el 127%
La devaluación de Massa se anunció en un contexto de nula credibilidad y en medio de la corrida contra el dólar en los mercados alternativos, en consecuencia las remarcaciones de precios se generalizaron violentamente y en tiempo récord.
La Dirección de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires confirmó que el IPC marcó un aumento de hasta el 10,8% al cierre del mes de agosto, el registro más alto de la historia desde el comienzo de la medición del indicador a mediados de 2012.
Los precios minoristas ya acumularon una suba del 79,8% desde el mes de enero, y funciona como una suerte de anticipo a lo que dará a conocer el INDEC para la totalidad del país en la próxima semana.
En alimentos y bebidas no alcohólicas la tasa de inflación mensual rompió récords y se disparó hasta el 12,5%, impactando de lleno en la canasta básica familiar sobre la cual se calcula la línea de la pobreza.
Las variaciones en algunos productos puntuales arrojan datos verdaderamente preocupantes. El promedio de precios para las carnes se incrementó en un 19,2% a lo largo de agosto, absorbiendo la mayor parte de la devaluación oficial (alrededor del 22,5%).
El precio del pan y los cereales se disparó un 10,4% mensual, las verduras, tubérculos y legumbres aumentaron casi un 16%, el segmento de la leche, productos lácteos y huevos subió un 7,7% en agosto. Todos estos bienes de primera necesidad impactaron de lleno en el bolsillo de los deciles con los ingresos más bajos de la población, en detrimento de los sectores más pudientes que pudieron protegerse mejor al acceder a instrumentos financieros o el atesoramiento de dólares legales.
Los servicios de salud (prepagas y obras sociales) aumentaron un 10,8%, los servicios públicos y la vivienda llegaron a trepar hasta un 13,8% en agosto, las tarifas de transporte público subieron un 9,2% y los precios en hoteles y restaurantes llegaron a aumentar un 8,3% en el mes.
El conjunto de bienes relevados por la Dirección de Estadísticas y Censos marcó un aumento promedio en torno al 12,4% mensual, mientras que el precio promedio para los servicios aumentó un 9,7% en el mismo período.
La tasa de inflación interanual se disparó oficialmente al 127,3% al término de agosto, un registro que extrapolado para el dato a nivel nacional llegaría a los umbrales más extremos de los últimos 32 años. La inflación está completamente fuera de control, pese a todas las restricciones y los numerosos parches anunciados por el Gobierno kirchnerista.